Pareciera que cualquier tipo de bicicleta puede usarse para la viajar en la ciudad, pero los diseños varían. Hay algunas bicis ideales para el deporte, que no funcionan tan bien en áreas urbanas, y viceversa. Aquí te compartimos las cualidades que tu bici necesita para llevarte por la ciudad con seguridad y comodidad: 

1. Arranque y frenos. Cuando elijas, sé consiente de tu estatura. Debes acelerar y frenar con comodidad, alcanzar el suelo y los pedales sin ningún problema para viajar o detenerte cómodamente con los otros vehículos. 

2. Aceleración. Algunas bicis son más ‘pesadas’ o ‘ligeras’ para controlar y maniobrar. Busca una que te deje andar a una velocidad cómoda para cruzar calles, cambiar de carril o rebasar con seguridad. 

3. Visibilidad. Deja que te vean en el camino. Hay bicis que te permiten viajar erguido y cómodo; eso resalta en el tráfico. También agrega un timbre (si quieres) para que los peatones te escuchen, o evitar puertas que se abren sin mirar. No olvides agregar reflectores (rojos detrás, blanco al frente y amarillo en los pedales) y luces (rojo arás y blanca al frente) para que la luz de los autos te reconozca en climas complejos. 

4. Control. Si no tienes luces direccionales, necesitas usar tus manos. Tu bici debe ser fácil de controlar con una sola mano para que la otra pueda comunicarse con los conductores, peatones y otros ciclistas.  

5. Velocidades. Esto lo determinará tu geografía. Si en tu ciudad hay muchas pendientes, necesitas velocidades bajas para subir con comodidad. O si es una ciudad más ‘plana’, necesitas velocidades altas para viajar más rápido, o quizá una para ir más cómodo. 

6. Otros accesorios. Necesitas un guardabarros para protegerte de charcos y lodo; un candado fuerte para evitar robos; y si quieres, alforjas o un cesto para cargar tu mochila (entre otras cosas). Por último, no olvides tu casco, agregar patas de cabra para estacionarte y protectores de cadena. 

¿Cuál es la ideal?

Eso dependerá de tus gustos personales y el uso que busques darle a tu bici. A continuación, te compartimos algunos de los tipos más comunes para moverse en la ciudad: 

• Urbana. Ideal para caminos pavimentados, empedrados y terracería. También se les conoce como bicis "estilo holandés". Están diseñadas para usarse en la ciudad, soportando golpes en baches, banquetas y topes. Te dejan viajar con el torso erguido para relajar brazos y cuello. Además, casi siempre tienen luces para mantener tu visibilidad en avenidas o calles.

• Plegable. Ideal para la ciudad y fácil de transportar en autos y autobuses, cuando lo necesites. Usan ruedas pequeñas para reducir su peso, aunque son más sensibles a irregularidades del pavimento. 

• Híbrida. Digamos que es el ‘hijo’ de una bici de montaña (diseñadas para deporte extremo) y otra de ruta (hechas para ser rápidas en pavimento). Es una excelente bicicleta en la ciudad, o para cuando quieras ejercitarte en el bosque, un parque o terrenos montañosos. 

• Fixie. Es una de las bicis más sencillas. Su diseño es muy simple y generalmente tienen una sola velocidad.  Son fáciles de mantener, pero muy eficientes y funcionales. 

• Cruiser. Para viajar rutas cortas y relajadas. Pueden tener desde una hasta tres velocidades, y utilizan frenos contrapedal. La principal desventaja es su peso. 

• Mini velo. Son pequeñas; de hecho, se crearon para guardarse en espacios reducidos. Tienen ruedas pequeñas, lo que facilita su transporte, aceleración y maniobrabilidad. 

• Eléctrica. Utilizan un motor que se recarga con tus pedaleos, para descansar las piernas en trayectos largos. Quizá son más costosas y pesan más, pero su uso está creciendo, pues son ideales para subir pendientes o viajar largas distancias. 

Cuando termines tu viaje, puedes estacionar tu ride en uno de nuestros ciclopuertos para ir a trabajar o divertirte. Recuerda, si quieres disfrutar una tarde sobre ruedas, te compartimos lo que necesitas saber para elegir una bici a tu medida, facilitando la convivencia con el tráfico de la ciudad.

Con apoyo de labicikleta y ecomovilidad